Día 20 de agosto de 2011...salimos destino Copenhage

Hemos decidido volver a Madrid un día antes para descansar y salir pronto por la mañana a coger nuestro vuelo. Nos despertamos sobre las 6.30 de la mañana. Mientras mi mujer hace el desayuno y repasa que no nos dejemos nada (dinero, pasaportes, documentación, tarjeta sanitaria europea ...) yo bajo algunas maletas al coche.

Una vez desayunados partimos hacia el aeropuerto. Salimos con tiempo, ya que nuestro vuelo sale a las 11.40, y no queremos encontrarnos con sorpresas de última hora. Como no queremos pagar parking decidimos dejar nuestro coche aparcado en el Campo de las Naciones. Allí tomaremos el Metro (Línea 8) que nos deja en una parada en el Aeropuerto. Recorremos el aeropuerto hasta nuestra zona de facturación. una vez en ellas unos chicos nos facilitan unas pegatinas que habrán de poner en nuestras maletas para que nos las lleven directamente al camarote del barco.

La facturación es rápida y cómoda. Como vamos sin prisa nos dirigimos a la puerta de embarque. Allí tampoco encontramos dificultad alguna y en pocos minutos ya estamos dentro. Tratamos de orientarnos enseguida y localizamos nuestra puerta de embarque al avión. Como falta una hora para que nos llamen hemos decidido pasear sin rumbo fijo.

El tiempo pasa y nadie nos llama. Parece, y se confirma, que nuestro vuelo va a sufrir retrasos...¡Adios a ver Copenhage y primera queja formal ante AENA!.

Mi primer crucero

El 20 de agosto de 2011 embarqué por primera vez en un crucero. La deicisión fué realmente dificil ya que mi maleta estaba cargada de prejuicios sobre este tipo de viajes. Tengo que reconocer que 7 días después mis opiniones se han matizado y por ello me he decidido a compartirlas con el resto de personas, cruceristas o no, que quieran conocerlas.

Este es un pequeño resumen de mi experiencia con Pullmantur, Pullmantur Air y el buque Empress. Espero que os sirva de ayuda a todos aquellos que tengais dudas.

Un saludo.